Letitia Geer y su revolucionario invento

Las mujeres han hecho grandes aportes a la ciencia, algunas desde cero y otras mejorando propuestas que ya existían y esto último, es precisamente el caso de Letitia Geer, una joven enfermera estadounidense que en el año 1899 diseñó y patentó la jeringuilla hipodérmica, toda una revolución ya que a pesar de que ya estaban presentes en el escenario médico algunas jeringas, estas eran demasiado rudimentarias.

Ante la preocupación por tener que estar constantemente introduciendo sustancias al cuerpo humano, optó por buscar una solución mucho más acertada sin siquiera imaginar que en ese preciso instante estaba haciendo historia, pues lo cierto es que, hasta ahora, nada ha podido superar la efectividad del mecanismo que propuso.

El gran aporte de Letitia Geer

La jeringuilla que creó es nada más y nada menos que la jeringa de una sola mano, pues la palanca del pistón se encuentra habilitada de forma tal, que el médico o profesional a cargo consigue inyectar la medicina con un movimiento rápido que no le exige hacer uso de las dos manos en todo momento.

Ya que lo que Geer buscaba era eliminar de una vez por todas el requerimiento de un asistente para poder inyectar una medicina, su invento fue lo suficientemente contundente para abrir un panorama completamente distinto que aún hoy en día permanece.

Incluso, las jeringas médicas modernas que se pueden encontrar, toman como base el trabajo de Geer, una mujer de la que se sabe poco, aunque su muerte se ubica en un 18 de julio de 1935.